Argentina:”Este tema ya está instalado en los distintos ámbitos, sólo falta la regulación” Fue encabezada por los doctores lamatritenses Marcelo y Mariela Morante. Ahondaron en los estudios sobre la utilización medicinal de la marihuana

 

Noticias Cañamo57593_104493

 

Hablaron desde el conocimiento, pero también desde el dolor y la emoción. Tal vez en esas tres palabras se resuma la conferencia que brindó el doctor Marcelo Morante, acompañado por su hermana Mariela Morante y David Lencina. Sobre la problemática del dolor y la utilización medicinal de la marihuana como ejes centrales de la exposición, los profesionales ahondaron en sus estudios, a la vez que solicitaron “compromiso y educación para poder tener pronto una regulación que permita poder experimentar con esta alternativa”.

La jornada se desarrolló el viernes en el Salón Blanco, bajo el título “Educación en nuevas herramientas y estrategias para el dolor”, y fue auspiciada por la Asociación de Profesionales de la Salud de General La Madrid.

Ante un auditorio colmado que aplaudió de pie el inicio -y más aún en el final- la charla comenzó con la presentación de la problemática apoyándose en un Power Point, a través del cual Marcelo Morante presentó la historia del cannabis sativa en relación con la medicina y repasó su viaje a Canadá para conocer en profundidad cómo se aplica el conocimiento en aquel país.

“Aprender y no demonizar”

Luego de la introducción, Marcelo Morante comenzó a detallar los beneficios de la marihuana y a describir cómo actúan sus moléculas sobre el sistema nervioso central.

“Es hora de que los profesionales se planteen la posibilidad de recuperar aquella planta, que con anterioridad se había comprobado que tenía muchos beneficios”, dijo.

Hay estudios que comprueban que surte efectos positivos para el dolor oncológico refractario. También indican que ayuda a evitar los vómitos producidos por la quimioterapia, el dolor de la esclerosis múltiple, en la caquexia del sida y el dolor neuropático; y además estimula el apetito, favorece el sueño y el humor.

En su planteo habló sobre contraindicaciones en pacientes con psicosis, con problemas coronarios o embarazadas. Aclaró que “como cualquier medicación hay efectos adversos, pero sostuvo que “en comparación con otras sustancias como la morfina o la oxicodona son de baja potencia y transitorios”.

Educación y legislación

“Si planteamos la educación de los médicos integrales, de la comunidad y del paciente para la utilización responsable, la problemática está pronto a resolverse”, remarcó Morante.

El gran problema es la regulación y por ello “se necesita una decisión política”, sintetizó. En 2006 se planteó a nivel legislativo la posibilidad de modificar la ley de drogas, pero hasta el momento no hubo avances.

“Es muy difícil la investigación con drogas prohibidas”, reconoció, y relató que a diario establece con distintos organismos sanitarios políticos del país para lograr autorizaciones.

En este punto detalló que en la fase de experimentación la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) sólo permite utilizar la medicación y elementos (vaporizador) deberían ser importados desde Canadá. Estas circunstancias hacen que los costos para llevarlos adelante sean muy elevados. Además se autoriza un universo reducido de pacientes sobre los que se podría experimentar.

En ocasiones esto lleva a que las personas hagan utilicen la cannabis por recomendaciones que hacen unos a otros y advirtió que esto ocurrirá hasta que no haya un compromiso y una legislación.

En otro pasaje de la charla, el médico nacido en La Madrid y radicado en La Plata habló sobre las dos líneas que existen en la discusión: los que están a favor y los que están en contra de la utilización de la marihuana. “La lógica no es pensar en eso, sino pensar en el paciente y el dolor que sufren. No soy ni uno ni otro, quiero resolver el problema de aquel que está enfermo”, resaltó.

Reflexiones finales

Marcelo Morante insistió en la necesidad de trabajar en una regulación y planteó como posibilidad tomar la que existe en Canadá, donde el Estado es el regulador, manteniendo los cuidados de las plantaciones donde se extrae la marihuana. Paralelamente se establece una relación directa entre el paciente y el profesional, quien la prescribe y entrega, sin intermediarios.

“Si logramos que los políticos nos den bolilla, entonces vamos a tener la educación médica y la regulación trabajando por el bien común. Yo les pido a los pacientes que les pidan a los políticos por la regulación. Esta es una medicina impulsada por el dolor y ahí nos darán una respuesta”, concluyó.

En primera persona

La doctora Mariela Morante padeció un problema de salud mientras se especializaba en medicina del dolor. Actualmente forma parte del grupo que trabaja junto con Marcelo en el Area de Investigación en Medicina del Dolor (Aimed).

“La vida siempre nos pone cosas enfrente: la enfermedad de mi mamá, mi enfermedad, pero siempre tenemos estímulos para salir adelante”, reflexionó la menor de los hermanos Morante.

“El Aimed es un granito para la gente, pero no sólo para ayudar en el dolor físico sino también paliar el dolor en la totalidad. Es un proyecto para hacerle el bien a todos los que lo necesiten”, contó.

“Esta medicación no reemplaza a las habituales, sino que es complementaria”, aclaró sobre la posibilidad de utilizar la marihuana con un uso medicinal. 57593_104493