Cáñamo Noticias
Oregon no fue el primer estado, o el más grande, para legalizar la marihuana. Pero cuando comienza la venta de marihuana al por menor el próximo mes, el Estado va a abrir un nuevo camino, porque va a examinar las solicitudes para borrar el registro de últimas condenas de marihuana. Trámites que siempre sellaría delitos de marihuana viejos ya está disponible en Oregon, gracias a una nueva ley, y aquellos que completan el proceso puede decir legalmente a cualquier empleador, arrendador o cualquier otra persona que pide que nunca han sido condenados o citan para cualquier delito de drogas en absoluto, informa Kirk Johnson en el New York Times. Hace quince Por Steve Elliott Cáñamo Noticias Oregon no fue el primer estado, o el más grande, para legalizar la marihuana. Pero cuando comienza la venta de marihuana al por menor el próximo mes, el Estado va a abrir un nuevo camino, porque va a examinar las solicitudes para borrar el registro de últimas condenas de marihuana. Trámites que siempre sellaría delitos de marihuana viejos ya está disponible en Oregon, gracias a una nueva ley, y aquellos que completan el proceso puede decir legalmente a cualquier empleador, arrendador o cualquier otra persona que pide que nunca han sido condenados o citan para cualquier delito de drogas en absoluto, informa Kirk Johnson en el New York Times. Hace quince años, cuando Erika Walton, entonces de 20 años, entregó una pipa con alguien que resultó ser un agente de policía, que fue citado por posesión de marihuana. Ella pagó la multa, pero la violación continuó perseguirla como parte de su registro. “Ha quitado gran parte de mi vida”, Walton dijo mientras se firmó a cabo sus huellas dactilares, que Oregon requiere para sellar el archivo. Walton dijo que la citación menor le costó cuando tuvo que divulgar en las solicitudes de empleo y de puestos de voluntarios en la escuela de sus hijos. • El blog de steveelliott • Lee mas – Ver más en: http://hemp.org/news/#sthash.qJjTR4Sx.dpuf años, cuando Erika Walton, entonces de 20 años, entregó una pipa con alguien que resultó ser un agente de policía, que fue citado por posesión de marihuana. Ella pagó la multa, pero la violación continuó perseguirla como parte de su registro. “Ha quitado gran parte de mi vida”, Walton dijo mientras se firmó a cabo sus huellas dactilares, que Oregon requiere para sellar el archivo. Walton dijo que la citación menor le costó cuando tuvo que divulgar en las solicitudes de empleo y de puestos de voluntarios en la escuela de sus hijos. • El blog de steveelliott • Lee mas – Ver más en: http://hemp.org/news/#sthash.qJjTR4Sx.dpuf